Asma: su prevalencia en la Península

El pasado lunes 25 de octubre tuvimos la oportunidad de entrevistar a la Dra. Jessica Valencia Rivero, neumóloga del Hospital Faro del Mayab. En esta entrevista, la especialista nos comparte información acerca de un padecimiento crónico e intermitente que, debido a las condiciones climáticas en la Península de Yucatán, se mantiene prevalente entre sus habitantes: el asma.

Durante la entrevista, la doctora nos informa que el asma se caracteriza por la inflamación crónica de la vía aérea y suele estar asociada a otros síntomas de alergia como son las alergias nasales, o en la piel. No obstante, nos aclara que no necesariamente todos los pacientes con asma presentan alergias.

“Cuando se padece de asma, los bronquios que son los conductos que llevan el aire de afuera hacia los pulmones, se inflaman y se cierran provocando que cueste mucho más trabajo respirar, sobre todo sacar el aire”, añade la especialista.

 

¿Predispuesto a padecer asma?

“Algunas de las cosas que nos hacen sospechar que un paciente pueda tener asma son: eventos respiratorios durante la infancia, que estos hayan sido más frecuentes que el nivel promedio; que durante toda su vida el paciente haya tenido alergias nasales, rinitis alérgica, alergias en la piel, alergias alimentarias e incluso alergia a los medicamentos”.

Una vez diagnosticados con asma, la doctora nos comenta que hay algunos casos en los que normalmente el asma se manifiesta durante la infancia y nunca se dejan de tener episodios. Aunque, por otro lado, hay pacientes que a partir de los 15 o 18 años no vuelven a tener otro episodio. Sin embargo, no se descarta que de adultos pueden recaer.

Igualmente, añade que hay casos conocidos como “asma de inicio tardío” en los que quienes los padecen son personas a partir de la tercera edad.

“Las alergias son las que comúnmente nos predisponen a pensar en asma, pero no todos los pacientes tienen antecedentes de alergias. Hay casos de personas cuyo padecimiento es asociado a obesidad, exposiciones laborales u otros factores que no son necesariamente alergias”.

De acuerdo con la Dra. Valencia, una de las

preguntas que frecuentemente se les hace a los pacientes para determinar si tienen asma es acerca de la frecuencia en la que presentan enfermedades respiratorias al año y si cada vez que se enferman la tos les dura más de uno a tres meses.

“Aunque no sea el diagnóstico de asma, preguntarles nos permite identificar si sus bronquios son hiper reactores. Y de esos pacientes que tienen hiperactividad bronquial algunos de ellos pueden ser asmáticos, no necesariamente todos, porque son cosas diferentes, pero es información que a los doctores nos sirve para orientarnos”, añade la especialista.

 

Síntomas

Acorde a lo que la Neumóloga nos informa, los síntomas que caracterizan al asma son: la opresión del pecho, la falta de aire al hacer actividades como subir escaleras o escuchar silbidos en el pecho.

En el caso de los silbidos en el pecho, estamos hablando de sibilancias las cuales son ruidos que se generan cuando la vía respiratoria se cierra. Éstas son un signo de que una persona puede estar presentando problemas respiratorios como es el caso del asma y la bronquiolitis, que por cierto es otra enfermedad respiratoria de la cual hablamos hace poco en nuestra entrevista con el Dr. Alejandro Martínez Frías, dónde también tocamos el tema de las sibilancias.

Pero volviendo a los síntomas del asma, la doctora nos menciona que cuando un paciente con la enfermedad respira profundo e intenta aguantar el aire, el pecho comienza a doler por la opresión y se genera la tos, la cual puede empeorar dependiendo de diferentes factores.

“Hay factores que en un paciente asmático pueden empeorar el control. Ahí entran las alergias de la nariz. Por ejemplo, si yo soy asmático y estoy completamente controlado con mis inhaladores, pero me empieza mucha alergia en la nariz y no la estoy tratando, esta alergia puede desencadenar un cuadro de asma exacerbado”

 

El asma y sus clasificaciones

La especialista informó durante la entrevista, que existen muchas clasificaciones para el asma. Sin embargo, generalmente se clasificar de dos formas: a partir de la persistencia en los síntomas del paciente y de la cantidad de tratamiento que éste necesite para controlar la enfermedad.

“Cuando estamos diagnosticando por primera vez a un paciente que nunca ha tenido tratamiento, se clasifica dependiendo de que tan persistentes y marcados sean sus síntomas. En cambio, cuando un paciente ya tiene tratamiento se clasifica dependiendo de la cantidad de tratamiento que requiera para mantenerse controlado. Es decir, mientras más dosis necesite de los inhaladores, pues es un asma de mayor dificultad de control”.

Igualmente, añade que hay una clasificación a parte que es el asma de riesgo vital.  Ésta es la que puede comprometer la vida de los pacientes pues en ocasiones hay personas han requerido ser intubadas o que han tenido algún paro por cuestiones de asma.

Asma vs Humedad

“Hay algunas personas cuyas alergias se desencadenan con la humedad, no pasa con todas las personas, pero sí parece ser uno de los factores más importantes en cuanto al asma”.

En cuanto a la Península de Yucatán, sabemos que es un ecosistema muy húmedo. Y no es sorpresa que nos encontremos en uno de primeros lugares comparado con el resto del país.

La neumóloga nos informa que, de los 5 niveles en el grado máximo de humedad, precipitaciones y lluvias temporales, nos encontramos en el 4 nivel, únicamente superados por los estados del sureste como tabasco. Cosa que indica una relación entre la prevalencia de la enfermedad y el estado del tiempo.

“Acerca de la relación de la humedad y el asma, pues sí hay algunos estudios, no directamente de la humedad, pero sí de la prevalencia de la enfermedad a nivel nacional y nos encontramos entre los primeros lugares”.

Siguiendo con lo que la doctora menciona en cuanto a los resultados de prevalencia de la enfermedad, las estadísticas de casos en la Península de Yucatán tienen datos muy cercanos a los que se presentan en la Ciudad de México, que no es una ciudad húmeda. Sin embargo, tiene demasiada contaminación cosa que también influye al momento de presentar asma.

“Es una enfermedad subdiagnosticada, es decir, que la mayoría de los pacientes no lo

identifican. O se enferman muy frecuentemente, les dan principios de neumonía o utilizan otras palabras, muchas veces mal empleadas, para definir lo que tienen. No hay principios de nada, lo tenemos o no lo tenemos. Pero muchos de estos pacientes, al tener este tipo de cuadros, puede que sean asmáticos e hiper reactores bronquiales y no se les está dando el tratamiento adecuado”.

 

¿El asma empeora con el tiempo?

Conforme a la información que nos brinda la especialista, el asma es una enfermedad crónica que no se cura y dependiendo de la gravedad en la que los pacientes la presenten es si será una muy leve, que solo necesiten tratamiento de forma intermitente, es decir, cuando les da una gripa o en algunas estaciones del año, o si será un paciente que requiera tratamiento en dosis máximas sin suspender.

“Es  como con la diabetes o la hipertensión, el asma no se cura, se controla. Hay pacientes que pueden tener asma muy leve y no necesiten tratamiento todo el tiempo, pero también en esos casos se debe llevar un seguimiento médico con estudios de control, no nada más -me siento bien- y lo dejo de tomar, porque eso favorece crisis graves.”

“El tratamiento es con otro tipo de medicamentos como son los esteroides inhalados. Es importante perder esa costumbre de ir a urgencias, nos pongan una inyección y con ya con eso mejoramos, porque eso no es un seguimiento adecuado de asma, y a largo plazo puede empeorar la evolución de la enfermedad”.

 

Asma y su prevención

“No existe forma como tal de prevenir el asma, algunas teorías de la infancia hablan de la exposición. Si cuando un niño está pequeño no lo exponemos al medio ambiente, es más probable que cuando se exponga desarrolle alergias. A diferencia de otro al que desde pequeño lo expongan a todo, es más probable que no desarrolle alergias”.

La doctora nos comenta que el asma es una cuestión genética dependiente del medio ambiente y de los cuadros respiratorios que pueda tener el paciente. Lo único que se podría prevenir en caso de tener la enfermedad son las crisis graves, esto se logra llevando un seguimiento adecuado y un tratamiento oportuno.

Del mismo modo, la especialista menciona que hay investigaciones acerca de la exposición al medio ambiente, cosa que explicaría porque el asma es más común en las ciudades comparado con los medios rurales. No obstante, nos comenta que son únicamente teorías pues nada de eso está realmente demostrado.

 

Tratamiento

Debido a que esta es una enfermedad intermitente, el tratamiento también lo es. La doctora nos comenta que hay pacientes cuya enfermedad empeora dependiendo de la estación del año.

“Tengo pacientes que más o menos para estas épocas van empezando sus tratamientos, aunque no tengan síntomas, todo para que en invierno no se exacerben. Sin embargo, si el paciente llega a complicarse entre marzo y abril, por la polinización, se realiza lo mismo meses antes para evitar una crisis”.

Indistintamente de llevar un seguimiento médico con la enfermedad, la doctora nos recalca que es de suma importancia saber que el tratamiento para el asma no es con el salbutamol, ni el Convivent, ni el ventolin. Ni ningún otro medicamento de alivio inmediato.

 

Recomendaciones

“Es importante llevar un seguimiento ordenado, para los pacientes que están controlados puede ser una vez cada 6 meses o una vez cada año, pero en general los pacientes asmáticos deben llevar un control y un seguimiento antes de llegar a la época en la que suelen presentarse dar cuadros respiratorios”, recomienda la especialista.

Lo que la doctora recomienda es que el paciente acuda primero con el especialista para hacer un diagnóstico adecuado y oportuno. Lo segundo es, como paciente, observarse. conocerse e identificar en que momentos o que factores son los que más desencadenan las crisis para que su médico pueda tomar eso como una referencia y así ajustar el tratamiento.

 

Dra. Jessica Valencia Rivero

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